Uno de los mayores retos de todo negocio hoy día, es poder permanecer en contacto con sus clientes a través de diferentes canales de comunicación, ya sea para proveerles de información oportuna, conocer sus inquietudes en relación con los productos o servicios que ofrecen o poder solucionar dudas. Es por esto que prácticamente todas las empresas tienen más de un canal activo, entre teléfono, correo electrónico, chats y redes sociales, pero la verdadera complejidad está en que estos trabajen en conjunto, para lograr una verdadera integración comunicacional.
Mediante la comunicación omnicanal, más allá de poder gestionar diversas formas de contacto con el cliente, el objetivo es integrarlas todas en una sola dirección, para que sea el cliente quien pueda escoger por dónde comunicarse, sabiendo que independientemente del canal, su proceso será atendido de manera coherente y su estatus estará siempre actualizado.
Es así como en retail marketing, utilizar una estrategia omnicanal ayuda a garantizar que los usuarios sean atendidos consistentemente, según sus necesidades, obteniendo una experiencia satisfactoria y, con las herramientas adecuadas de gestión, disminuir diversos riesgos de una empresa, como son los pagos a destiempo y la pérdida de información relevante para cada cliente.
¿Cómo beneficia la comunicación omnicanal a otras áreas diferentes a la de marketing?
La comunicación omnicanal puede beneficiar a otras áreas además de la de marketing. Una vez que el cliente decide hacer una compra, después de emitida la factura, entra en juego otra área esencial: cobranzas.
Parte de la gestión de riesgos corporativos recae en contar con un sistema de gestión de cobranzas que utilice una estrategia omnicanal, que le permita a los consumidores empoderarse y poder escoger entre varias formas de pago, además de disponer de diversos canales de notificación que los mantenga informados en cada fase del proceso de pago.
¿Qué hacer para reducir riesgos en una empresa retail asociados a las cobranzas?
Para poder disminuir los riesgos de una empresa relacionados con las cobranzas, es imprescindible garantizar el pago de deudas de manera oportuna, analizando el comportamiento de pago real de cada cliente y proveyendo proyecciones a los encargados de cuentas por cobrar, para conocer los días probables de pago. En este sentido, la implementación de mensajes automatizados vía SMS o email a clientes deudores garantiza una comunicación eficaz y oportuna, en función de reducir la morosidad en las fechas más apropiadas para lograrlo.
En Estados Unidos 58% de los recaudadores dicen que hoy es más complicado contactar a clientes que hace 5 años, y 53% de las empresas recaudadoras de deuda están considerando usar mensajes de texto para comunicarse con consumidores, pero además, implementarán dentro de los próximos años redes sociales e email dentro de su estrategia.
El siguiente reto es poder garantizar que los consumidores cuenten con diferentes medios de pago, en conjunto con las notificaciones oportunas e información del saldo en sus cuentas. Básicamente, cualquier cliente se sentirá más cómodo realizando un pago por medios al alcance de su mano, como por ejemplo a través de propio smartphone, y recibiendo una notificación instantánea que dé cuenta de la eficiencia del centro de cobranzas, lo cual derivará en una mejor experiencia de compra.
¿Qué herramientas existen para mitigar los riesgos en una empresa asociados a las cobranzas?
Queda claro que en la actualidad la comunicación omnicanal sirve de referencia en múltiples tipos de negocio por lo que vale la pena implementar un buen sistema de gestión de cobranzas, como lo es Cobrotech CONNECT, que forme parte de la gestión de riesgos corporativos de tu negocio.
Cobrotech utiliza inteligencia artificial para la gestión de cobranzas por medio de mensajería automatizada, y además se integra muy eficientemente a los CRM y ERP de tu empresa, optimizando así tus procesos de cuentas por cobrar y permitiéndote anticiparte ante cualquier contingencia de liquidez para mantener la operatividad de tu compañía, especialmente cuando del rubro retail se trata.